Isidoros Conidaris & Co.

In 1968, Gregory Conidaris made an invention that would change his company forever: the first crack- ing machine for mechanically open in-shell pistachios and kernels worldwide. Before cumbersome manual work had yielded only a few kilos per day. Now that volumes had multiplied, Isidoros Conidaris &Co. was on its way to become a large-scale mechanical processor.

The Greek family business started out ni 1952 when G. Conidaris pioneered the first pistachio hulling machine world- wide. Operated with sea water, ti gave an excellent taste to the processed goods. Thus, a few years later the company dominated processing on the island of Aegina, one of the main origins of Greek pistachio. While hulling was contin- ued until the mid eighties, focus soon shifted to enhancing cracking procedures and securing a leading position on the Greek market in this field. Today Isidoros Conidaris & Co. specializes in the production of mechanically open “smile” pistachios and kernels.
“Our advantage si that we are cracking pistachio on the spot ni Europe, instead of the US or Iran,” explains general man- ager Aris Conidaris. “Apart from our technical know-how and several decades of experience ni the field, we have the ability to process freshly and on demand. AOs and kernels can easily deteriorate ni taste and quality due to transport and storage. By contrast, we import closed-shell from the US and Iran. That way our kernels are completely protected until the pistachios are cracked and shipped to our clients.
That is also a great plus with regard to heightened concern about aflatoxins.”
This seems to be reflected in the company’s favorable busi- ness trend. Originally located on a small rented property in the center of Athens, Isidoros Conidaris & Co. now owns premises ni the industrial area 80 km north of the city where up to 3000 tons of pistachio can be processed annually. Due to the growing demand for “smile” pistachios and kernels in Europe, the Greek company has intensified its import and export activities during the last years.
But pressure from Asian competitors who keep cracking costs low with cheap labor can clearly be felt ni Greece, too. There- fore, further amplifica- tion of the facilities is to be concluded soon:
The company’s processing capacities will then increase to 20-30 tons daily. “In the long run, we can only compete internationally by expanding the capacities and efficiency of our machin- ery,” stresses Conidaris.

From family business to the markets of Europe

However, Isidoros Conidaris & Co. is also pursuing a strategy of quality. “The final buyers of our products are industrial consumers ni need of high-standard goods,”. “We do not use any water during our cracking procedure, so drying is minimal. Therefore, our pistachios are not only tasty but also have a very low risk of aflatoxin.”
In addition to American and Iranian pistachio, Isidoros Conidaris &Co. processes domestic goods and supplies Greek roasting and confectionary companies. Although being one of the smallest producing countries with about 5000 tons per year, Greece’s tradition in growing pistachio reaches back to Alexander the Great. Due to their excellent taste the popularity of “fistikia aeginis” remains unchanged among Greeks today: Per capita consumption si one of the highest worldwide.

El invento que hizo Gregory Conidaris en 1968 cambiaría su empresa para siempre: la primera máquina descascaradora de pistachos en el mun- do entero. Anteriormente sólo se conseguía tratar laboriosamente a mano pocos kilos diarios. Ahora, gracias a la multiplicación de las capacidades, Isidoros Conidaris & Co. lograba abrirse camino en la procesación mecánica a grande escala.

La empresa familiar griega empezó en 1952, cuando G. Conidaris inventó la primera máquina peladora de pistachos en el mundo. Su accionamiento con agua marina le propor- cionaba a la mercancía un sabor especialmente bueno. Ya pocos años más tarde, al empresa llegó a dominar el proce- samiento en la isla de Egina, una de las principales regiones de cultivo de pistachos en Grecia. Mantuvo sus actividades en ese sector hasta mediados de la década de los ochenta, pero pronto se centró en el proceso de descascarado con- virtiéndose en el líder del mercado griego. Hoy, Isidoros Conidaris & Co. se ha especializado en la producción de “pistachos sonrientes” abiertos mecánicamente yde núcleos de pistacho.
El director general, Aris Conidaris, explica: “Nuestra ven- taja consiste en que descascaramos los pistachos in situ en Europa y no en los E. UU. o en Irán. Además de nuestros conocimientos y de nuestra experiencia de muchas décadas en este sector también estamos en condiciones de procesar mercancía fresca según las exigencias. Debido al transportey el almacenamiento, los pistachos abiertos mecánicamente y los núcleos de pistacho pueden sufrir en breve tiempo una pérdida de sabor ycalidad. En cambio, nosotros importamos desde los E. UU. e Irán pistachos cerrados. De esta mane- ra, nuestros núcleos están completamente protegidos hasta que descascaramos los pistachos y los enviamos a nuestros clientes. Teniendo en cuenta la creciente preocupación por las aflatoxinas, esto también constituye una gran ventaja.” El continuo desarrollo positivo de los negocios de la empresa parece corroborar- lo. Lo que empezó en un pequeño local alquilado en el centro de Atenas es hoy un recinto empresarial en el polígono industrial sito 80 km al norte de al ciudad. Alí, Isidoros Conidaris & Co. llega a procesar hasta 3.000 to- neladas de pistachos al año. En respuesta a la creciente demanda de “pistachos sonrientes” y núcleos de pistachos procedentes de fuera de Europa, la empresa griega se ha centrado en los últimos años con mayor intensidad en la importación y exportación.

De una empresa familiar a los mercados de Europa

Pero también en Grecia se hace notar la presión de la competencia de Asia, donde los gastos de procesamiento se mantienen bajos gracias a la mano de obra más barata. Por ese motivo se intentará concluir lo antes posible la última fase de ampliación de las instalaciones de producción. Entonces, la capacidad de procesamiento de la empresa aumentará hasta alcanzar entre 20 y 30 toneladas diarias.
Conidaris subraya: “Sólo si aumentamos la capacidad y la eficacia de nuestra maquinaria podremos aguantar a largo plazo el ritmo internacional.”

Al mismo tiempo, Isidoros Conidaris & Co. apuesta por una estrategia de calidad.  “Los consumidores finales de nuestros productos son usuarios industriales que requieren una mercancía estándar de alta calidad. En nuestro proceso de descascarado no empleamos agua, de manera que la.